Chichinales, conocida como «El Portal del Valle», se erige al noroeste de la provincia de Río Negro, en el departamento General Roca, en el corazón mismo de la Patagonia argentina. Fundada en el siglo XIX, Chichinales es reconocida como la localidad más antigua del Alto Valle del Río Negro, siendo un testimonio vivo del devenir histórico de la región.

El desarrollo de Chichinales se vio impulsado con la finalización en 1916 del Dique Ballester, una obra emblemática que propició el crecimiento tanto de la región como de la propia localidad. La irrigación, llevada a cabo mediante la construcción de canales, llegó a Chichinales en 1928 gracias al ingeniero Rodolfo Ballester, abriendo las puertas a una próspera producción agrícola que incluía alfalfa, frutas y vides.

Inicialmente dedicada a la ganadería, Chichinales floreció con la implementación de sistemas de riego que permitieron a las colonias locales cultivar una amplia variedad de productos, desde frutas y hortalizas hasta viñedos. Este cambio marcó el inicio de la transformación del Alto Valle del Río Negro en un próspero valle agrícola, donde el verde de los cultivos pintaba el paisaje con sus colores vivos.

La historia de Chichinales se entrelaza con la de muchos pueblos y localidades del Alto Valle, siendo reconocida como la cuna de numerosas colonias que con el tiempo se erigieron como importantes centros urbanos. Hoy en día, Chichinales sigue siendo un símbolo de tenacidad y progreso, recordando su legado como pionera en el desarrollo agrícola de la región.